Nadie

No hay que escribir en caliente y por una vez yo no lo hice. Tras una noche de pelearte con la almohada ves las cosas un  poco mejor. Puede que sea cosa de la falta de sueño (en las peleas siempre gana la almohada) pero se ve todo desde otro punto de vista. Cuando se te escapa y no puedes hacer nada debes evitar hablar en los primeros momentos, no va a haber nada que puedas arreglar con las palabras. Tampoco debes irte mirando para otro lado o hacer como si no pasase nada. Solo tienes que escuchar. Escuchar y darte cuenta que con menos de 20 años el mundo no está a tus pies y que a veces lo que soñamos es de simplemente  imposible. No vale de mucho lamentarse, no vale de nada en realidad porque por mucho que llores tal y como hacías cuando tenias 3 años no va a venir tu padre a darte la piruleta. Esto es así y no se puede cambiar .NADIE tiene la culpa. Es digamos una pequeña parte mala. Solo hay que mirar el resto, sonreír y darte cuenta de la suerte que tienes porque el resto es increíblemente perfecto.

La palabra nadie no me gusta, es una palabra triste y sola. Por eso siempre procuro utilizarla mediante una comparación…me parece más alegre y justa, como la utiliza la siguiente canción.

Cierto punto

A ver si me consigo explicar. Es ese punto en el que estás tan segura de algo que cierras los ojos y simplemente lo ves. Observas cada detalle como si estuviese ocurriendo en este preciso instante. Delante de tus ojos está todo, absolutamente todo lo necesario para ser feliz. Tienes exageradamente claro que no necesitas nada más. Extrañamente ves hasta tu sonrisa aparecer por tu cara…Sabes que habrá más de un junio y más de un febrero y no puedes ser más feliz. La ilusión te come la cara poco a poco hasta el punto de parecer tonta a ojos de terceros. Pero de da todo igual. Tienes clarísimo que solo te importa una cosa.

Despertador

Tienes ante ti el mayor problema de tu vida, eres consciente de ello y aun así quieres que no se acabe nunca. No encontrar una solución sería lo mejor que podría pasarte. Está en tu cabeza  todo el tiempo, no hay un segundo en el que ese maldito problema no machaque tus neuronas. Pero te gusta, te gusta mucho. Es una cosa inevitable. Y aunque fuese evitable tú no lo evitarías. Nada importa a parte del problema. Es lo único que te preocupa. A veces te desesperas, sientes una desazón terrible solo de imaginar que un día abras los ojos y todo esté solucionado, que todo sea como antes. Es lo peor que te podría pasar. Mejor no pensar en eso. Mejor seguir escribiendo cosas sin sentido para muchos en este blog en vez de estudiar, mejor seguir pensando en que no solo mañana, sino todos los días de mi vida voy a seguir teniendo el mismo problema. Está claro que tengo el mejor despertador del mundo, y sabiendo eso ¿quien no quiere despertarse?. Tengo mucha suerte.

Recuerdos

Los días pasan y pasan, y tu vas recordando momentos...imagenes mentales que intentan suplir su ausencia. Poco a poco lo vas consiguiendo. Recuerdas exactamente cada palabra que salió de tu boca el primer día que hablasteis o cada mirada que se te escapaba  sin que puedieses hacer nada para evitarlo.
Pero sobre todo recuerdas como estabais cerca pero lejos, y te das cuenta de como ahora estando lejos estais mas cerca que nunca, y eso es lo que verdaderamente te importa. Es asi.